De perdidos al rio... 10 años después

Hola, Jesús: Si lees esto, quiere decir cuatro cosas: 1.- Que sigues vivo (de momento vamos bien), no ha habido ningún cataclismo nuclear ni has muerto en un accidente de globo. 2.- Que mantienes la misma dirección de correo electrónico (algo sorprendente), y que además recuerdas la contraseña (mas sorprendente todavía con tu memoria) 3.- Que tienes acceso a internet (lo cual quiere decir que no estas mendigando en la calle ni has perdido la vista...seguimos bien entonces). 4.- Que los de futureme.org han cumplido su promesa (gracias, thank you futureme.org) Hace diez años eras un chaval de 24 sin un trabajo y un sueldo dignos de tu valia (seamos realistas), sin una novia digna de tu valia (la verdad es cruel, lo sé ...), y sin esperanzas de que todo vaya a mejor, como en un pozo sin fondo (joder, que triste). Si, las cosas no van bien... Ahora mismo estoy en la oficina del café central escuchando la Chacona de Purcell, con un gripazo del quince y con un hambre del treinta. 3 de Nov de 2003. Peso 85 kilos y el Aznar es todavia presidente (para que te hagas una idea). Te veo dentro de diez años. Calvete, casado (con Maria, supongo), con un crio rubicundo correteando por ahi, la ilusion de tus dias y el baculo de tu futura vejez. Espero que ya seas, por lo menos, un abogado de postin, y que la cartilla del banco te permita una vida acomodada. Para entonces, ya debes haber escrito un libro y aprendido a tocar el violín, entre otras ocupaciones burguesas y banales. Me gustaría (es decir, te gustaría pero en el pasado) extenderme, pero la verdad es que no hay mucho que contar. Simplemente espero que tus ilusiones se hayan hecho realidad y que este mensaje te permita recordar quien eras. Solamente procura no olvidar que la mayor gloria de un hombre es hacerse inolvidable para aquellos que habitan el mundo con el, para aquellos a quienes les ha tocado vivir contigo estos días inciertos. Así que, ahora que aun estas a tiempo, intenta hacerlo realidad; y no olvides lo que decia papá: aunque sea poniendo un ladrillo, procura ser el mejor en lo tuyo. Cuidate la espalda, que si me duele a mi ahora, a ti te dolerá una barbaridad. Que no sucumban tus esperanzas. Jesús